Toda el alma
Cristina Arribas González
Suena oscuro y silenciosamente amoroso y el traqueteo de los picos al ascender a nuestros troncos
seducidos por la temperatura de la hilera de pasos al fondo percutiendo calóricamente entre frutos y sábanas
El ajetreo y la fricción de sus patitas
El traspiés de sus marcas
La señal de despedida
Enseñar al cuerpo a posponer la ardiente
cicatriz de ese pellizco en medio
de la discusión de los fluidos
Amarse a fondo
Con ternura de suspiros suspendidos
Ahí en ese aliento de fuego y aire
Ya casi aclimatados
Esos cuerpos
Se comen todo el alma
Son cuerpos sabios que no se necesitan
que adquieren la indumentaria de pasos y pellizcos
Repiten pasos y pellizcos...